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Babel participó en la 8ª edición de Revolution Banking 2022, el evento de referencia del sector bancario organizado por iKN Spain. En él, tuvimos la oportunidad de compartir diferentes mesas de debate con varias empresas tecnológicas para hablar de las tendencias que marcarán el futuro de la Banca en los próximos años. 

Desde Babel, la visión que tenemos es que la Banca a diferencia de otros sectores, tiene muchos más retos que llevar a cabo si quiere alcanzar una completa transformación del negocio: 

  • El primero está en cuanto a necesidades de digitalización, sin olvidarse de los clientes que no pueden o no quieren ser digitalizados, haciendo que la relación que mantienen con su entidad financiera sea distinta. 

  • El segundo es que la Banca lleva muchos años operando apoyados en sistemas de computación, lo que hace que el legacy cada vez sea mayor. Además, estos sistemas son capaces de ejecutar grandes volúmenes de información y transaccionalidad de manera muy robusta. 

  • El tercero es que a los bancos por el tipo de actividad que realizan son los más sensibles a ataques externos, por lo que debemos diseñar los sistemas pensando en la prevención del fraude como regla general. 

  • Otro reto y no menos importante, es que nuestros bancos y entidades financieras deben sobrevivir en un mundo cada vez más tecnológico dentro de un entorno muy regulado, por lo que el presupuesto dirigido hacia áreas de Cumplimiento suele ser muchas veces mayor que el dirigido a áreas de Transformación o Innovación. 

  • Por último, tenemos el reto de la disrupción. Cada vez vemos más iniciativas y algunos neobancos que lejos de ofrecer un servicio completo, se vuelcan en ofrecer servicios especializados con productos de mayor rentabilidad y atractividad. 

Con todo este contexto vemos que, para poder realizar una transformación, un banco necesita mucha variedad de perfiles y muy especializados, pero si a eso le sumamos la dificultad que tenemos todas las empresas tecnológicas para acceder al talento en estos tiempos, nos hace reflexionar sobre aquellas tendencias que marcarán las líneas futuras de trabajo dentro de la Banca, que para nosotros son cinco: 

  • Analizando las dificultades que tenemos para acceder al talento, lo primero que debemos pensar es en que debemos “Automatizar” al máximo posible las tareas del día a día, pero nuestro camino hacia esta Hiper-automatización dependerá del grado de madurez con el que están definidos los procesos dentro de la compañía. Gracias al Process Mining somos capaces de generar un “AS IS” para llevar a cabo una automatización que debe ir más allá de un táctico basado en RPA, debemos ser capaces de conseguir orquestar los procesos de toda la compañía eliminando el trabajo repetitivo. 

Si además conseguimos dotar de IA a dicha automatización, conseguiremos resolver tareas de mayor complejidad y, por tanto, obtener un mayor rendimiento de dicha automatización. Aquí nosotros ya disponemos de varios ejemplos resolviendo diferentes problemas del sector en torno al tratamiento de los documentos, por ejemplo, a la hora de tramitar una hipoteca o cuando estamos ante un proceso de bastanteo de poderes. 

  • Siguiendo con el mundo de la Inteligencia Artificial, vemos que aún hay mucho que explotar de los datos dentro de una entidad financiera. Al fin y al cabo, un banco tiene información muy valiosa, mucho más que otras compañías de otros sectores, ya que conocen donde sus clientes gastan su dinero e incluso sus no clientes gracias a la PSD2. 

Aquí los retos a los que nos enfrentamos son variopintos, pero todo pasa por utilizar correctamente los datos que tengo y una vez conseguido, poder enriquecerlos con datos ya sean internos o externos, habiendo algunos tan interesantes como los de geoposicionamiento. Si en el banco conseguimos que exista una calidad suficiente en nuestros datos, disponibilizarlos de forma adecuada y con capacidad de industrialización, a la hora de construir modelos tendremos mucho ganado. 

  • La tercera tendencia viene a resolver el reto de cómo los bancos se dotan de escalabilidad, aquí nuestra apuesta no es quedarnos solo en el Cloud, sino definir una estrategia Muilticloud Híbrida adecuada a cada entidad, ya que debemos seguir cumpliendo con la regulación y además maximizar el ROI de nuestras inversiones en tecnología. Es por ello que esta estrategia debe complementar lo que existe “per se” en el e identificar todo lo que debe ser transportable y por tanto definir el Journey to Cloud. 

  • Otra tendencia a tener en cuenta tiene que ver con la seguridad, algo que se ha convertido en un factor crítico para los bancos, por lo que es necesario construir una adecuada estrategia en torno a la Ciberseguridad. El cliente ha dejado de ir a la oficina donde interactuaba con el banco, para que ahora el banco se introduzca en nuestras casas y esto tiene un coste oculto y es que debemos de dejar ser defensivos, para pasar a ser preventivos con un modelo basado en Threat intelligence y no quedarnos en lo que a seguridad perimetral se refiere. Aquí pensamos que contar con los aliados estratégicos que nos ayuden a establecer estas defensas es clave. Además, pensamos que reglamentos como DORA han venido para que hagamos una reflexión interna para saber si estamos bien preparados y sino busquemos soluciones a problemas que pueden ir a más en un mundo digital. 

  • Por último, pero no menos importante, pensamos que los paradigmas Low Code o Zero Code, término muy marketiniano que se ha venido viciando con el tiempo, no deja de ser una solución a varios de los problemas que vemos en el día a día de nuestros clientes ya que podemos aplicarlo al desarrollo, que es lo que convencionalmente hemos hecho con el Low Code for Application, pero también es aplicable al mundo de los procesos en nuestro camino hacia la hiper-automatización o inclusive en lo que se refiere a MLA.  

Low Code no deja de ser una forma de aproximación a la tecnología base, donde ya dispongo de una serie de herramientas que reducen la complejidad para hacer que las implementaciones sean más ligeras o veloces. Es por ello que decimos que aplicando este tipo de herramientas reducimos el Time to Market pero además evitamos enfrentarnos a cierto nivel de complejidad a la hora de resolver mi business case

Con este tipo de soluciones reduciremos el número de perfiles expertos que vamos a necesitar, democratizando el mundo del desarrollo y por ende, estaremos mejor preparados ante la lucha por el talento tecnológico que venimos sufriendo, ya que se reduce la dependencia de este talento tan experto en tecnología y además podemos conseguir a los departamentos de negocio dentro de la ecuación para que tengan su propia capacidad de autoservicio sin depender de IT. 

No obstante, a pesar de los beneficios, el Low Code se enfrenta a varios retos y el primero es que este tipo de soluciones no dejan de ser tecnológicas, que deben mantenerse, escalarse y gobernarse desde la organización. Esto lleva a las áreas de tecnología a analizar bien el panorama antes de tomar decisiones, ya que existe un miedo a la dependencia. 

Aquí lo que debemos pensar es que el Low Code no es la respuesta a todos nuestros problemas, sino más bien un complemento para solucionar aquellas cosas que por falta de foco, por falta de prioridad o por falta de presupuesto no se resuleven en los tiempos adecuados

Para finalizar mi reflexión, podríamos llegar a hablar de una 6ª tendencia si pensamos en la computación cuántica con la que reduciremos los tiempos de computación y veremos muchas aplicaciones en el futuro, sobre todo, pensando en resolver problemas de gran complejidad y escalabilidad. Esta tecnología para nosotros ahora mismo está en fase de investigación y desarrollo y en breve estaremos viendo aplicaciones a casos de uso en Banca sobre todo en lo que se refiere al ámbito de la Ciberseguridad y prevención del fraude pero seguro que en más disciplinas. 

 

David  Ramos
David Ramos

Head of Digital Banking at Babel.

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